domingo, 27 de septiembre de 2015

El secreto de Omar Bravo


La edad promedio para el retiro de un jugador de futbol profesional en México es a los 34-35 años, algunos lo hacen antes como Luis García que se marchó a los 31 y otros juegan más, aunque muchas veces lo hacen en la liga de ascenso donde hay menor nivel, como el caso de Cuauhtémoc Blanco que se retiró a los 41. Lo más usual en un jugador profesional de 35 años de edad en el país es que juegue pocos minutos, que corra menos y que su mente empiece a concentrarse en qué rumbo tomará su vida próximamente.

Por eso me sorprende que un jugador como Omar Bravo, quien además de tener 35 años de edad juega como delantero, siga siendo la máxima figura del Guadalajara…la pregunta entonces es, ¿por qué?, ¿qué le pasa a Omar Bravo?, ¿por qué no deja de correr, de mostrar orden y concentración?, ¿cómo es posible que desde el torneo anterior sea uno de los jugadores que más recorridos tiene en la cancha?, ¡¿Qué no se supone que ya no se hace eso a los 35 años?!

 La respuesta es compleja porque puede deberse a distintos factores. En primer lugar, porque a diferencia de muchos otros jugadores que se desempeñan como delanteros y al final de su carrera son relegados a otras posiciones Omar Bravo ha tenido la "fortuna" de mantenerse en su posición natural, y aunque al jugar en otras áreas del campo como en su paso por Cruz Azul y en la segunda etapa con Chivas (esta es su tercera) ha dado buenos resultados, hoy demuestra más que nunca que lo suyo lo suyo es la delantera. Es decir, sigue jugando donde mejor lo sabe hacer.

Otra razón se debe claro está, a que Omar ha demostrado que el apellido le queda como anillo al dedo, porque esa bravura lo ha llevado desde ser campeón con su equipo, campeón de goleo y máximo anotador de todos los tiempos para el Guadalajara, hasta grabar su nombre en el futbol mexicano y ser seleccionado para cuatro copas Oro, una copa América, unas olimpiadas y un mundial, jugar en Europa y, algo que pocos logran, jugar donde lo odiaban (Atlas) y ganarse su respeto y cariño, hasta regresar al Guadalajara para convertirse no solo en el capitán sino en el líder que grita, ordena, exige y promueve la unión del equipo ante la adversidad. A Bravo lo respetan no solo por su habilidad y goles, experiencia, o carácter, lo respetan porque es capaz perder la capacidad de asombro ante temas extra cancha y concentrarse en el futbol.

Un motivo más es su genética e historial deportivo pues Omar, cuyo nombre significa "larga vida", continúa ejercitándose y alimentándose como al momento de su debut, para muestra solo observen su físico que continúa siendo prácticamente el mismo que en el 18 de agosto de 2001 cuando anotó el primero de sus 195 goles como profesional, además en el pasado practicó otros deportes como el box y el beisbol que de alguna manera le brindan un plus a su exitosa carrera.

Pero la cuarta razón y quizá la más válida para el propio Omar, más que tener habilidades excepcionales, más que ser Bravo de apellido y de carácter, más que genética o cuidados, lo que en verdad le ha ayudado para tener un resurgimiento cuando ya cumplió todo lo que un jugador puede aspirar, es tan pura que mejor los invito a ver el siguiente video de tres minutos donde lo entrevistan Enrique "El perro" Bermudez y Enrique Martínez de Univisión . 
 Estoy seguro que al final del día este es su motor:


http://www.univision.com/deportes/futbol/omar-bravo-no-pudo-contener-el-llanto-al-hablar-de-su-hijo-video